miércoles, 21 de enero de 2015

LOS ORATORIOS DE HAENDEL


        Se denomina “Oratorio” a una obra musical realizada para coro y orquesta, a veces con solista y un narrador (antiguamente recibía el nombre de “historicus”) que explicaba la situación desde un lado del escenario.
El Oratorio está destinado a una sala de conciertos con lo cual se diferencia de la ópera aunque tenga muchos elementos de ella (prácticamente nacieron juntos): introducción (obertura, preludio), recitativos, arias, duetos, coros, interludios, etc... Tiene sus orígenes a mitad del siglo XVI y su principio se atribuye al “Oratorio de San Girolamo della Carità”, cenáculo religioso fundado por san Felipe Neri en Roma. Proveniente de la Contrareforma el oratorio combina el elemento épico de caracter religioso y divino con lo humano, consigue su cima en el siglo XVIII con el gran músico alemán Georg Friedrich Haendel (1685- 1759) y afincado en Inglaterra a partir de 1710. A él se debe la perduración del “Oratorio” a través de la historia.
Aunque figure en las producciones de músicos con la talla de Francisco Guerrero, G. P. Palestrina, Orlando di Lassus o Tomás Luis de Victoria, a finales del siglo XVI el oratorio comienza a mostrar síntomas de cansancio, se anuncian tiempos nuevos. Son notorios los desarrollados por Alessandro Scarlatti con influencias operísticas de la escuela de Nápoles.
Haendel fue prolífico tanto en óperas como en oratorios (a partir de 1720 todos serán de texto inglés), suelen ser obras larguísimas --- en la actualidad se reducen a la duración de concierto (no más de dos horas y media) --- y se dividen, generalmente, en tres actos, cada uno compuesto por diversas escenas. Su oratorio más famoso es “El Mesías” (HWV 56, compuesto en 1741), todo él memorable aunque se recuerde el fragmento “Aleluya”, a veces reproducido suelto. “El Mesías” (“Messiah”, en inglés, “Der Messias”, en alemán) también está dividido en tres partes. Arias, recitativos, coros mezclados genialmente entre si, sentimientos de multitud, universo de emoción y grandeza, magnitud en epopeya magistralmente expuesta, plasmada sobre ingentes evocaciones pictóricas y arquitectónicas sonoras... Una de las culminaciones de la música barroca. En los coros Haendel se identifica con la multitud; en los recitativos --- intimistas --- habla o reza para él mismo. Algunos están inspirados directamente en la Bíbilia (varios del Antiguo Testamento como “Saúl”, “Israel en Egipto”, “Sansón”, “Baltasar”, etc.; otros en la mitología clásica: “Hércules”, “La elección de Hércules”, etc.). Los fragmentos sinfónicos que tejen sus oratorios son heterogéneos: comentando la acción, “Saúl”) o “divertimento” intercalado (el concierto de arpa de “Alexander’s Feast”).
Los textos de sus oratorios (en ópera serían los libretos) en general son de amigos suyos (Humpreys, Pope, el reverendo Miller, Hamilton) y casi todos los inspirados en la Bíblia son de Jennens o del reverendo Morell, quien escribió todos sus esquemas a partir de 1746. Su primer encuentro con el género, aún escrito en italiano, se da con “La Resurrezione” (HWV 47, 1708) con un texto de Carlo Segismondo Capece, habilmente construído sobre la resurrección de Jesucristo.
En el oratorio haendeliano se encuentran también episodios instrumentales que sirven de nexo de unión al discurso dramático, bien como oberturas o como episodios genéricos (escenas descriptivas, campestres, batallas) con cierta inclinación a la obertura “alla italiana” (a la manera de conciertos para solista: primer y tercer movimientos rápidos con un segundo movimiento central lento, propio de Antonio Vivaldi). En grandes ocasiones, como en “El Mesías”, se sirvió de una obertura de tipo francés: un grave, majestuoso tono que da paso a un fugado el cual, a veces, cerraba el episodio y en otros conducía a un tiempo final.
ORATORIOS DE HAENDEL: “La Resurrezione” (1708), “Aci Galatea e Polifemo” (1708), “Il Triomfo del Tempo e del disinganno” (1708), “Il Pastore Fido” (1712- 1734), “Acis e Galatea” (1718), “Esther” (1732), “Deborah” (1733), “Athalia” (1733), “Il Parnaso in Festa” (1734), “Alexander’s Feast” (1736), “Il Trionfo del Tempo e della Verità” (1739), “Saul” /1739), “Oda a Santa Cecilia” (1739), “L’allegro, il Penseroso e il Moderato” (1740), “El Mesías” (1741), “Samson” (= “Sansón”, 1743), “Semele” (1744), “Joseph and Bethren” (1744), “Hercules” (1745), “Belshazzar” (1745), “Occasional Oratorio” (1746), “Judas Maccabeus” (1747), “Joshua” (1748), “Alexander Balus” (1748), “Susanna” (1749), “Solomon” (1749), “Theodora” (1750), “The Choice of Hercules” (= “La elección de Hércules”, 1751), “Jephta” (1752) y “The Triumph of Time and Truth” (1757).


                                                                                                                           Narcís Ribot i Trafí

No hay comentarios:

Publicar un comentario