sábado, 24 de septiembre de 2016

KANDINSKY, NACIMIENTO DE LA ABSTRACCIÓN (I)


                                      Wassili Kandinsky (Moscú, 1866- Neuilly- sur- Seine, afueras de París, 1944) fue el precursor de la Abstracción en pintura y teórico del arte. Después del traslado de su familia a Odesa estudió leyes en Moscú (1886-1889) y en 1896  rechaza una prometedora plaza  de profesor en la Universidad de Dorpat. Decidido ya a dedicarse a la pintura se desplaza a Munich en donde funda el grupo “Phalang” (“Falange”) en 1901 cuyo enfoque principal es la introducción de las vanguardias francesas: Impresionismo, Simbolismo y “Jugensdtill”= Modernismo Alemán, abriendo una escuela a tal efecto.
Paisajes elaborados con espátula son sus primeras obras a principios de siglo, umbríos y oscuros al principio, intensos y coloristas como los “fauves”, después. Pinta también temas fantásticos basados en la tradición rusa y alemana. Viaja a Venecia y contempla el crepúsculo en Moscú lo cual le despierta su primer interés por los colores, siendo sus preferidos (como dice en sus memorias) el verde claro/fresco, negro, rojo carmín y ocre amarillo; le apasiona el descubrimiento de la pintura de Rembrandt con sus tonalidades de luz y color que influenció en sus primeras obras. 
En 1895 a una representación del “Loengrin”, de Richard Wagner (el leiv-motiv usado por Wagner, asociación libre de una melodía a una idea abstracta, influirá en la futura obra pictórica de Kandinsky). Para quedar maravillado y en el mismo año se prendó de las obras de los impresionistas franceses en Moscú. En 1910 dará su primera obra considerada abstracta (“Primera acuarela abstracta”), aunque algunos sostienen que ha de fecharse en 1913. Franz Marc y Kandinsky formaron el segundo conjunto expresionista: “Der Blaue Raiter” (“El jinete azul”), sin finalidad de establecer un grupo homogéneo como “Die Brucke” (“El puente”), sino de de organizar un espacio de relaciones compuesto por todos los movimientos de vanguardia. Consiguieron realizar muestras y exposiciones y a las filas de la asociación se sumaron personajes como Robert Delaunay y Arnold Schönberg (participó como pintor aunque después destacara y se hiciera famoso en el campo de la música, aportando su teoría dodecafónica o atonal, carente de forma estructurada y equivalente abstracto de la pintura kandinskiana). El camino hacia la abstracción total estaba abierto...

Podríamos decir que en relación a la regla tradicional del arte como imitación de la realidad se había roto en 1910 (o 1913), con la aparición de la “Primera acuarela abstracta” de Kandinsky. Dos años después publicó el libro “De lo espiritual en el arte” donde exponía la teoría de sus planteamientos, proponiendo --- en su ataque al materialismo reinante --- una dimensión espiritualista. El arte procede de una necesidad interior (idea presente ya en el Romanticismo) exponiéndolo por medio del color y la forma. Para Wassili Kandinsky los colores (como los sonidos) poseen un significado propio actuante sobre los sentidos  y puede llevar (si somos  perceptibles a la manifestación artística) a una experiencia espiritual. Si un color provoca tan solo un efecto superficial (mismo caso que en el sonido) o el grado de sensibilidad no es muy alto el efecto desaparecerá al acabar el estímulo. La percepción de colores y formas ha de ser total/integral, no solamente de la parte consciente del ser humano sino también del subconsciente- De esta forma a partir de Kandinsky (referente al arte abstracto) no hay en toda la superficie del cuadro ni una sola pincelada que exponga al espectador la más mínima idea de una realidad objetiva ofrecida por el pintor. Se ha prescindido de cualquier tipo de perspectiva desplegando una obra totalmente plana. Una sensación de relativa profundidad a la par de una impresión de lejanía y cercanía se deberá a la buena combinación de colores fríos (azul, verde pálido) y cálidos (rojo, marrón)...

No hay comentarios:

Publicar un comentario